UNIDOS EN LA BIODIVERSIDAD PROSPERAMOS JUNTOS

Agricultura Ecológica

La agricultura ecológica es un enfoque integral y sostenible que se preocupa por la salud de los suelos, los ecosistemas y las personas. Se basa en principios que buscan minimizar el impacto humano en el medio ambiente, utilizando técnicas que preservan la fertilidad del suelo, mantienen la diversidad biológica y construyen comunidades resilientes. A través de métodos naturales de control de plagas, la rotación de cultivos y el uso de fertilizantes orgánicos, la agricultura ecológica busca producir sin recurrir a químicos sintéticos ni a prácticas que dañen la vida del suelo o la biodiversidad. En esencia, se trata de trabajar con la naturaleza y no en contra de ella, para lograr un sistema de producción de alimentos que sea verdaderamente sostenible.

Biodinámica

La agricultura biodinámica es una de sus vertientes más destacadas, basada en los principios del filósofo Rudolf Steiner, que incluye la utilización de preparados biodinámicos para mejorar la vitalidad del suelo, el seguimiento de un calendario lunar para las labores de siembra y cosecha, y la creación de un compost enriquecedor. Este enfoque también promueve la producción propia de semillas, para preservar la diversidad de variedades y adaptar los cultivos al entorno local.

Huertas

La integración de huertas implica un enfoque respetuoso con el medio ambiente que maximiza la eficiencia de los recursos. Los desechos animales, ricos en nutrientes, se utilizan como fertilizantes naturales para enriquecer el suelo de las huertas, reduciendo la necesidad de fertilizantes químicos y minimizando la contaminación ambiental. Además, la diversificación de la producción agrícola que ofrecen las huertas aumenta la resiliencia del sistema frente a enfermedades o plagas y mejora la seguridad alimentaria.

Animales

Los animales en la agricultura ecológica juegan un papel esencial en el ciclo cerrado de nutrientes. Los cultivos producidos en las huertas proporcionan alimentos saludables y nutritivos para los animales. Esta relación recíproca promueve la salud de todos los seres vivos en la granja y permite un uso eficiente de los recursos. Esta integración de animales en el sistema agrícola contribuye a una relación más armoniosa entre los seres humanos, los animales y la naturaleza, haciendo la agricultura más sostenible.